A lo largo de dos semanas el curso pretende ofrecer de forma atractiva y con el apoyo de lecturas, ejercicios y otros materiales, las claves fundamentales para la incorporación de criterios éticos en la gestión de la información y en las decisiones que el ejercicio profesional compromete a diario.

El comportamiento moral en las organizaciones necesita de algo más que el llamado sentido común y de la ética personal del trabajador. A lo largo de la historia grandes pensadores han reflexionado sobre normas y valores con las que iluminar la acción del ser humano y se han desarrollado diversas herramientas útiles para conseguir el equilibrio entre lo justo y lo bueno, entre lo útil y lo ético.

En la actualidad es frecuente escuchar manifestaciones acerca de la necesidad de una sociedad, unas redes sociales, una transformación digital o un uso de los datos éticos. Esa reclamación se ha hecho evidente al convertirse la globalización y la digitalización en realidades propias de nuestra época.

El colectivo profesional que gestiona información desde que llega a sus manos hasta que la pone al de las personas usuarias, es decir personal de bibliotecas, archivos, centros de documentación, empresas tecnológicas y computacionales, empresas de digitalización y preservación, de redes sociales y otras instituciones afines, se enfrenta a toma de decisiones que en ocasiones generan conflictos éticos con usuarios, con colegas o con sus superiores.